Durante este verano hemos asistido a diversas noticias relacionadas con la seguridad y la adecuación de los tratamientos en los centros de estética y depilación.
Por un lado, hemos sabido de políticas de inspección llevadas a cabo por ayuntamientos, como el de San Sebastián de los Reyes (Madrid), o de gobiernos regionales, como los de Aragón o de la ciudad autónoma de Melilla. Dichas políticas atañen a aspectos como la seguridad, la profesionalidad de los centros, la adecuación entre la publicidad y los servicios que se ofrecen, o la naturaleza y homologación de los dispositivos que se utilizan.
Pero por otro lado, y como las causas tienen sus efectos, o esos polvos esos lodos, hemos tenido también noticia de tres casos de denuncias en Valladolid por parte de personas que sufrieron quemaduras al recibir tratamientos de depilación láser. http://www.elmundo.es/elmundo/2011/07/24/valladolid/1311497295.html
Parece evidente que el boom de aperturas de centros de depilación en nuestro país – la semana pasada hablábamos de casi 2.000 centros funcionando- juega con el riesgo de que no se cuiden al máximo las premisas de calidad, eficacia, adecuación y seguridad, a veces ante la imperiosa y acuciante necesidad de incrementar o asegurar el negocio. De ahí que las autoridades sanitarias hagan bien en extremen las políticas de prevención de fraudes.
Como bien señala este artículo http://www.pysnnoticias.com/2011/09/30/la-clinica-de-estetica-y-su-regulacion-en-espana-2/ , “Las Comunidades Autónomas son las competentes para regular, otorgar, y por tanto inspeccionar, los requisitos para la autorización de centros, servicios y establecimientos sanitarios. El Real Decreto 1277/2003 (…) establece las bases mínimas y comunes para las garantías de seguridad y calidad de la atención sanitaria, que posteriormente podrán ampliar las Comunidades Autónomas en su normativa territorial y crea el Registro General de centros, servicios y establecimientos sanitarios, con acceso público, donde podrán consultar la lista de centros sanitarios autorizados”.
No obstante, el desafío es de todos, no sólo de los organismos oficiales. Como también apunta el citado artículo, España es líder en tratamientos e intervenciones, en profesionales, en técnicas y en aparatología. De manera que centros, franquicias, fabricantes y todo el ecosistema que conforma la cadena de valor de este sector, tiene la misión de refrendar ese liderazgo con los más estrictos controles. Se trata, ni más ni menos, de que nuestro sector alcance la excelencia en términos de , seguridad, satisfacción de los clientes… y por supuesto, en prácticas de negocio exitosas.
En este sentido, estamos en condiciones de afirmar que las soluciones que ofrece Cloud Remote Control Technologies sin duda ayudan a mejorar la gestión, seguridad y satisfacción de los clientes al proporcionar un control remoto total sobre el funcionamiento de la máquina de depilación y la utilización por parte de los centros de depilación. Nuestro Control de Tratamientos para Franquicias permite incluso fijar máximos y mínimos de los principales parámetros del tratamiento para evitar errores o fallos que pueden resultar en quemaduras, etc.
Txema Arnedo, vicepresidente de Ventas y Marketing de Cloud Remote Control Technologies
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